La iglesia de la Magdalena es la más antigua de Plasencia. Tiene unos enterramientos mozárabes del siglo IX. Sobre los restos fúnebres de esta ermita se construyó la nueva románica, en el siglo XII, ya fundada Plasencia como tal.
En sus inicios, la iglesia de la Magdalena era de tres naves y por tanto tres ábsides. De dimensiones más bien escuetas. Hoy se conservan únicamente dos ábsides, ya que en 1811 fue saqueada e incendiada por las tropas napoleónicas. Aún se conservan unas pinturas que recorren el muro interior de la ermita, datadas en el siglo XVI. Por tanto, en un pequeño espacio y pese a las inclemencias del tiempo, tenemos un recorrido histórico que va desde lo mozárabe a lo renacentista pasando por lo románico. Un compendio del arte, historia y cultura placentinos.
En su rehabilitación en 2008 se apostó por el cristal creando un juego de reflejos y sin restar protagonismo a parte de la muralla medieval que también se puede vislumbrar en este lugar.
Además, el complejo alberga un centro para la promoción de la artesanía extremeña que reúne, para venta y exposición, objetos de cerámica, piel, corcho y metal entre otros. La sala pertenece a una red de centros de artesanía dirigida por Artesanex ubicados en Cáceres, Badajoz, Llerena y Villafranca de los Barros. Encontramos aquí una tahona fechada en el siglo XIX, llamada de los bocanegra, que consta de un horno de magníficas dimensiones que estuvo en activo hasta 1975. Se puede visitar un silo mozárabe, de 1’40 metros de profundidad, con restos de cerámica pertenecientes al siglo IX.
Sin duda uno de los rincones más mágicos y con más historia de la ciudad de Plasencia, donde puedes conocer de primera mano la mejor artesanía extremeña y a su vez, uno de los monumentos más interesantes y recónditos que alberga la ciudad.
